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De niña me encantaban las novelas de ciencia ficción y distopía. Era una lectora empedernida de Los Juegos del Hambre, Divergente, 1984, Fahrenheit 451… Me fascinaba esa frontera ética del desarrollo tecnológico: el punto en el que la ciencia deja de ser promesa y empieza a convertirse en dilema.
Cuando empezó el boom de la IA generativa, allá por finales de 2022, volví a sentir esa mezcla de asombro y vértigo. Por primera vez, lo que antes solo imaginaba en mis novelas empezaba a hacerse realidad. Y aunque en estos tres años ya nos hemos acostumbrado a convivir con máquinas que nos responden como si fuesen humanas, hay momentos en los que la tecnología vuelve a dejarnos con la boca abierta.
El lanzamiento del modo agente de ChatGPT ha sido uno de esos momentos. Una mezcla entre ilusión (porque las posibilidades son enormes) y respeto (porque las implicaciones éticas y de seguridad no son menores). En este artículo quiero explicarte en qué consiste este nuevo modo, cómo funciona y qué precauciones debes tener en cuenta si te animas a probarlo.
Qué es el modo agente de ChatGPT
El modo agente es una de las novedades más potentes que ha lanzado OpenAI en los últimos meses. Hasta ahora, ChatGPT se comportaba como un asistente conversacional: tú le dabas una instrucción (“escríbeme un email”, “resume este texto”, “analiza este anuncio”), y él te respondía dentro del propio chat.
Con el modo agente, esa dinámica cambia. ChatGPT deja de ser un simple interlocutor para convertirse en una especie de agente autónomo, capaz de actuar fuera del chat. Puede abrir páginas web, interactuar con herramientas externas e incluso ejecutar pasos de forma automática.
Lo más interesante es cómo lo hace: cuando activas el modo agente, se abre una mini pantalla o escritorio secundario dentro del propio ChatGPT. Desde ahí, puedes ver cómo la IA va trabajando en tiempo real: abre pestañas, navega por webs, recopila información, ejecuta acciones… Es hipnótico.
Tú ya no le dices qué hacer paso a paso. Le das un objetivo, una misión, y el agente traza su propio plan para cumplirlo. Además, siempre puedes supervisar el proceso; puedes revisarlo, modificarlo o pausarlo en tiempo real.
En qué se diferencia del ChatGPT que ya conocíamos
Hasta ahora, el funcionamiento de ChatGPT era básicamente reactivo: tú formulabas un prompt y él respondía. Si querías que hiciera algo complejo, tenías que ir guiándolo paso a paso. El modo agente invierte los roles: no le das instrucciones concretas, sino un objetivo general. Por ejemplo:
“Encuentra potenciales clientes en LinkedIn para una agencia de marketing digital en Donostia.”
Y el agente, después de entender lo que le pides, entra en LinkedIn, inicia sesión (previa autorización tuya), realiza la búsqueda, analiza los perfiles y puede incluso exportar la información a un Excel o documento de Google Drive.
Otro ejemplo:
“Compara los precios de estos productos en tres supermercados distintos y compra cada uno en el más barato.”
El agente abre las webs de los tres supermercados, busca los productos, añade cada uno al carrito correspondiente y deja todo listo para que tú solo tengas que confirmar la compra.
El cerebro… y los brazos
Una buena forma de entender este salto es con una metáfora sencilla. Hasta ahora, ChatGPT era un cerebro: tú le pedías que pensara, que analizara, que escribiera… y él lo hacía dentro del propio chat. Pero ahora ese cerebro tiene brazos, es decir, puede “salir” a internet y actuar. Puede:
- Crear una hoja de cálculo en tu Google Drive.
- Escribir y guardar un borrador de email en tu bandeja de entrada.
- Enviar mensajes en LinkedIn a los leads que ha encontrado.
- Automatizar tareas que antes te requerían varias herramientas o mucho tiempo manual.
Y esto, para los profesionales del marketing, es una auténtica revolución. Te dejo una tabla para que veas las diferencias de un vistazo.
Cómo usar el modo agente de ChatGPT de forma segura
Los grandes poderes conllevan grandes responsabilidades, y también grandes riesgos. Aquí van los principales:
1. Cuidado con las credenciales
Para que el agente pueda acceder a herramientas externas, a veces tendrás que iniciar sesión. Si, por ejemplo, quieres que entre en LinkedIn o Gmail, tendrás que darle tus datos de acceso.
👉 Consejo: nunca uses tus cuentas personales. Crea cuentas secundarias o de prueba con datos mínimos. Así evitarás poner en riesgo tu información o tu red profesional.
2. Prompt injection
Al navegar por internet, el agente puede encontrarse con páginas manipuladas que intenten engañarlo para obtener tus datos personales. Aunque OpenAI ha implementado medidas de protección, el riesgo sigue existiendo.
👉 Consejo: evita pedirle que visite webs desconocidas o que interactúe con dominios poco fiables.
3. Supervisión constante
El modo agente actúa de manera autónoma, pero tú mantienes el control. Si ves que empieza a hacer algo que no te convence, puedes detenerlo en cualquier momento. Conviene supervisar sus acciones, sobre todo cuando maneja información sensible.
👉 En resumen: el modo agente es una herramienta potentísima, pero también exige una dosis extra de responsabilidad digital. Sigue estos consejos, y tú también alucinarás con lo que es capaz de hacer.
El impacto del modo agente para el marketing
¿Qué impacto tiene el modo agente de ChatGPT para quienes vivimos entre funnels, KPIs y campañas publicitarias? Porque no estamos hablando solo de avances tecnológicos, sino de una herramienta con potencial real para transformar cómo hacemos marketing digital.
- ¿Necesitas espiar a la competencia sin que parezca que tienes demasiado tiempo libre? El modo agente puede rastrear webs para detectar cambios de precio, lanzamientos de nuevos productos o alteraciones sospechosas en los claims.
- ¿Quieres dejar de improvisar en redes sociales? Que cree tu calendario de publicaciones, lo alinee con fechas clave y te sugiera ideas de contenido según tendencias de búsqueda que ha obtenido de Google Trends.
- ¿Te interesa saber qué dice la gente sobre tu marca (sin pasarte la tarde en foros oscuros)? Que extraiga y resuma conversaciones de Reddit, Twitter o cualquier sitio donde tu reputación esté en juego.
En definitiva, este modo agente hace tareas que normalmente necesitarían un equipo entero de marketing realizando tareas anodinas y repetitivas, pero con más eficiencia y rapidez. Es decir: libera tu tiempo de lo rutinario para que tú puedas dedicarte a la estrategia y a aportar valor añadido.
Así que, después de todo lo que hemos visto, te lanzo la pregunta… ¿Vale la pena probar el modo agente? Para mí, ¡es un sí rotundo!
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